Del algoritmo al Derecho: cómo la Inteligencia Artificial generativa está transformando el sector legal
La Inteligencia Artificial generativa es un fenómeno complejo, dinámico y fascinante, que ha demostrado claramente su capacidad de crear obras originales que desafían las expectativas humanas. Esta tecnología está llamada a impulsar transformaciones del mismo nivel que en su momento lo hizo la internet, incidiendo en cada uno de los aspectos de la vida del ser humano y la sociedad y por tanto, el sector legal no es la excepción. Este fenómeno se enmarca dentro de un grupo de tecnologías de Inteligencia Artificial (IA) [1], que en su conjunto están encaminadas a reformar economías, aumentar la productividad, mejorar la eficiencia y reducir los costos, siendo de esta manera definida como un “nuevo factor de producción”[2].
Su incalculable alcance nos hace replantear la manera en que estamos haciendo las cosas, ya que su factor diferenciador radica en su capacidad de imitar las funciones cognitivas del ser humano y entregar resultados únicos, que no existían antes de pedírselos, los cuales ponen en el centro de la discusión el potencial de este tipo de IA en cada sector económico.
En comparación a las otras formas de IA, por el grado de incidencia de esta IA generativa, un grupo mucho más amplio de partes interesadas está estudiando su impacto en las empresas y la sociedad, pero sin mucho contexto que les ayude a darle sentido. Dentro de estas partes, también se encuentra el sector legal, interesado en comprender y medir el alcance de esta tecnología en el quehacer de sus profesionales y en la complejidad de las tareas que estos realizan.
Un sector consciente de su existencia, pero inadvertido de su alcance
Una investigación sobre las actitudes hacia la IA generativa y ChatGPT dentro de los estudios jurídicos de Thomson Reuters Institute indica, que la gran mayoría de los abogados y profesionales de estudios jurídicos conocen ambas herramientas y la mayoría cree que deberían usarse para el trabajo legal [3]. Este estudio resalta principalmente las inclinaciones positivas hacia la IA generativa, a pesar de que aún se encuentran en proceso de determinación del lugar de dicha herramienta dentro de su organización.
El nivel de reconocimiento sobre la tecnología y su potencial nos pone en frente a una visión, a no tan largo plazo, de revolución de todo el sector legal. En la transformación que ha vivido con la digitalización y la automatización de los procesos, este ha estado llamado a reinventarse y mantener el valor en su oferta. Ahora, se suman a estas transformaciones una que no se preveía de tal impacto, la de la Inteligencia Artificial generativa, con sus infinidades de facilidades que obliga a llevar un proceso de transformación más acelerado.
Dada dicha realidad, actualmente el sector legal se encuentra en la fase de la generación de conciencia y reconocimiento sobre la existencia de la IA generativa y su potencial. Luego de superada dicha fase, estaremos listos para avanzar hacia la implementación cautelosa y adaptación proactiva de la herramienta digital a las expectativas, intereses y necesidades de aquellos que practican el Derecho como profesión.
Automatización de la gestión legal y otras ventajas
Sobretodo, destaca el potencial de la IA generativa de cambiar la anatomía del trabajo, aumentando las capacidades de los trabajadores mediante la automatización de algunas de sus actividades individuales. Siendo así, se estima que la IA generativa actual tiene el potencial de automatizar actividades laborales que hoy absorben entre el 60% y el 70% del tiempo de los empleados [4]. Por tanto, esta es una de las principales ventajas que se discuten con respecto a la implementación de esta tecnología en el sector legal, ya que la misma ahorra a los profesionales el tiempo dedicado en tareas repetitivas, para permitirles centrarse en aspectos más creativos y estratégicos de la práctica legal.
A dicha ventaja se le suma la capacidad de procesamiento de grandes volúmenes de información y datos que ofrece la tecnología, la cual aprovecha su dominio del lenguaje natural para recopilar y procesar información valiosa para la toma de decisiones estratégicas en menor tiempo. También, dicho lenguaje favorece el intercambio comunicacional entre abogados, clientes y profesionales de otras áreas al simplificar el lenguaje jurídico complejo, así como paralelamente traducir los requerimientos externos en procesos legales.
A grandes rasgos, muchas de las actividades laborales que implican comunicación, supervisión, documentación e interacción con las personas en general tienen potencial para ser impactadas por la IA generativa [5].
La adopción de tecnologías con IA generativa permitirá ganar una ventaja competitiva al mejorar la eficiencia de los procesos, agilizar la toma de decisiones y proporcionar servicios legales de alta calidad de manera más rápida y precisa, lo que a su vez responderá las expectativas de los clientes sobre sus abogados de mantenerse a la vanguardia de la tecnología [6].
La información en el centro de la cuestión
Es importante enfatizar, que además del valor potencial que la IA generativa puede aportar en casos de usos específicos, la tecnología suma un incalculable valor a cada organización al revolucionar los sistemas internos de gestión del conocimiento, y por tanto se demanda una supervisión más minuciosa de esta capacidad. Una vez más, el dominio de la IA generativa del lenguaje natural ofrece a los profesionales el manejo y aprovechamiento del conocimiento interno almacenado, de una manera eficiente y organizada, sin que pierda las ventajas cognitivas que caracterizan el manejo humano [7].
Precisamente, en una industria donde su activo más valioso es la información, urge empezar el trabajo por la estructuración de instrucciones, normas y protocolos para el manejo de la misma a través de las herramientas de IA generativa. Su regulación debe contemplar los principios de licitud, consentimiento, seguridad y veracidad, que también se establecen en normativas relacionadas como la de protección de datos, y complementarse con conceptos como el de trazabilidad del conocimiento y responsabilidad sobre lo generado.
La Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial (ENIA) de la República Dominicana aborda en su debida proporción este asunto al establecer dentro de sus objetivos la actualización de la Ley No. 172-13 de Protección de Datos Personales, con miras a fortalecer la transparencia en el uso de los datos y la protección especial de datos sensibles [8]; asunto que también comparte relevancia con la necesaria adaptación de un marco nacional de propiedad intelectual y derechos de autor en lo concerniente a IA generativa.
ChatGPT y otras herramientas de IA generativa creadas para el sector
Las herramientas de IA generativa que habilitan dichas funcionalidades y ventajas que se han discutido en este artículo son los transformadores preentrenados generativos (GPT, por sus siglas en inglés), los cuales están en constante desarrollo para ofrecer una herramienta cada vez más aprovechable, intuitiva y ajustada a las necesidades de su público objetivo.
Principalmente, dichas herramientas se han enfocado en la redacción y revisión de documentos, optimizan el tiempo y los recursos para permitir a los profesionales centrarse en aspectos más complejos y estratégicos de sus casos. No obstante, su alcance en este sector se expande en algunas ocasiones al resumen de la información, la generación dinámica de contenidos y a la función de un “copiloto jurídico” como un asistente personal especializado.
Entre estos transformadores se destaca ChatGPT como la herramienta de IA generativa por excelencia en la actualidad, la cual ha llevado a esta tecnología a tener el reconocimiento con el que cuenta hoy en día. Esta ha democratizado el acceso a esta tecnología con una herramienta gratuita con un amplio alcance que permite ser aprovechada en diferentes sectores.
Además de ChatGPT, también se identifican otras herramientas, cuyas funcionalidades han sido focalizadas en la práctica del sector legal como lo son Casetext y Spellbook, los cuales fungen como copilotos legales, Ask Blue J con un enfoque hacia la asesoría tributaria, Leya, de la cual destaca principalmente su capacidad de procesar información especializada, y muchas más herramientas lanzadas y por lanzar al mercado.
En el contexto de este tema, también compete destacar las técnicas a dominar para sacar el mayor provecho a dichas herramientas. Estas técnicas son la ingeniería de promts [9], para estructurar consultas o preguntas de manera específica para generar la respuesta deseada, y el Retrieval Augmented Generation (RAG), para asegurar una referencia cruzada del contenido generado que ayude a garantizar la mayor exactitud y precisión posible.
Conclusión
Es innegable, que la implementación de la IA generativa elevará exponencialmente la competitividad al facilitar y automatizar procesos, cuya ejecución únicamente respondía a la capacidad de un profesional del Derecho, lo que llevará a cada Firma de abogados a perfeccionarse y mejorar su oferta de valor con servicios legales cada vez más robustos. Por tanto, el mayor impacto de la IA generativa en el sector legal no será simplemente la automatización de tareas y funciones, sino el aprovechamiento de esta tecnología para brindar resultados a los clientes de maneras completamente nuevas [10].
En resumidas cuentas, la idea clave que debemos tomar como consigna es planteada por Cristina Jiménez, presidenta de la Fundación Fide, en su presentación de la AcademIA Generativa:
"La inteligencia artificial generativa supone una revolución para el sector legal, y aquellas entidades y profesionales que sepan aprovechar y exprimir el potencial de estas tecnologías, obtendrán una clara ventaja competitiva" [11]. (Sic)
Fuentes bibliográficas:
[1] La Recomendación sobre la Ética de la Inteligencia Artificial adoptada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en noviembre de 2021, como primer instrumento normativo del tema a nivel internacional, define la Inteligencia Artificial como “(t)ecnologías de procesamiento de la información que integran modelos y algoritmos que producen una capacidad para aprender y realizar tareas cognitivas, dando lugar a resultados como la predicción y la adopción de decisiones en entornos materiales y virtuales. Los sistemas de IA están diseñados para funcionar con diferentes grados de autonomía, mediante la modelización y representación del conocimiento y la explotación de datos y el cálculo de correlaciones”.
[2] Gobierno de la República Dominicana, Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial (ENIA), versión 01, octubre 2023, p. 18.
[3] Thomson Reuters Institute, ChatGPT & Generative AI within Law Firms, 17 de abril de 2023, disponible en https://www.thomsonreuters.com/en-us/posts/technology/chatgpt-generative-ai-law-firms-2023.
[4] McKinsey Global Institute, The economic potential of generative AI: the next productivity frontier, junio 2023, p. 3.
[5] Ibid, p. 41.
[6] Cristina Jiménez y Alex Rayón, Fundación Fide y Brain & Code, “Inteligencia Artificial Generativa (IAG): una revolución al alcance del sector legal”, 24 de enero de 2024.
[7] McKinsey Global Institute, op. cit., p. 40.
[8] Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial (ENIA), objetivo 1.2.1.
[9] Según ChatGPT 3.5, un "prompt" es una entrada o instrucción inicial proporcionada al modelo para guiar su generación de texto o contenido. Este prompt puede consistir en una frase, pregunta o fragmento de texto que establece el tono, tema o dirección que se desea que siga la IA al producir su respuesta. El prompt es fundamental para influir en la salida del modelo y puede afectar significativamente el resultado final generado por la IA.
[10] Sara Molina, “La Inteligencia Artificial generativa en el sector legal”, Abogacía Española, 16 de octubre de 2023, disponible en: https://www.abogacia.es/publicaciones/blogs/blog-de-innovacion-legal/la-inteligencia-artificial-generativa-en-el-sector-legal/.
[11] Cristina Jiménez y Alex Rayón, op. cit.